Vive NW
Durante el invierno, muchos de los que vivimos en las áreas urbanas del noroeste del Pacífico nos regimos por el lema: “Si aquí está lloviendo, en las montañas está nevando”.
Ese tipo de frases nos ayudan a sobrellevar nuestros lluviosos inviernos, los cuales pueden ser difíciles de aguantar si se vuelven muy extensos; sin embargo, siempre está el lado positivo de las cosas. Ciertamente, si en las zonas metropolitanas de Oregon está lloviendo, lo más probable es que esté cayendo nieve en alguna de nuestras hermosas montañas.
No obstante, disfrutar de esta temporada de frío no se limita a las montañas. Mientras que algunos piensan que los viñedos cierran en los meses de invierno, los que saben insisten en que esta temporada es la mejor para visitar los cultivos de uvas.
El sitio de internet de la Asociación de Viñedos del Valle Willamette constantemente tiene ofertas de paquetes de temporada y clasifica los lugares según los intereses de cada persona.
Con más de 750 viñedos y 550 bodegas para degustar, el vino aquí –en particular su mundialmente reconocido pinot noir– es definitivamente un asunto de todo el año. Visitar durante la temporada más tranquila (entre noviembre y marzo), brinda la oportunidad de conocer más de cerca el proceso de la producción del vino, sin las multitudes que se pueden encontrar en los meses más ocupados.
Los aspectos más destacados en esta época del año incluyen combinaciones de trufas y vinos, el ‘Mes de la cena y el vino’ en McMinnville (hasta febrero), entre muchas otras opciones para degustar algunos de los mejores vinos del mundo que ofrece nuestra región.
Además, el valle Willamette es el hogar de algunos de los eventos invernales más atractivos del estado, como el ‘Christmas in the Garden’ en el Oregon Garden durante diciembre –una exhibición de luces, cerveza alemana al aire libre y pista de patinaje sobre hielo cubierta–. También está el ‘Festival de la Trufa’ en enero y febrero, con cenas especiales, caminatas para buscar comida y competencias de perros en el bosque.
Otro aspecto a considerar es que, durante el invierno, esta región no es tan fría en comparación con otros lugares del noroeste del Pacífico. De hecho, el clima del valle Willamette es relativamente templado durante casi todo el invierno. Claro, está lluvioso, pero con un poco de ropa para la lluvia puedes disfrutar de la tranquilidad del aire libre durante los meses invernales.
Si te encuentras cerca de Salem, te recomendamos dirigirte al área recreativa del lago Detroit. Ubicado en el corazón del Bosque Nacional Willamette, gran parte de esta área de 3 mil 500 acres es accesible durante todo el año. Si te gusta caminar o caminar con raquetas de nieve, disfrutarás de muchas millas de senderos que serpentean a través del bosque brumoso.
En caso de que tengas ganas de quedarte a pasar la noche en esta área, te recomendamos The Lodge at Detroit Lake. Estas acogedoras cabañas ofrecen un ambiente rústico combinado con comodidades modernas que incluyen televisores de pantalla plana, chimeneas y bañeras de hidromasaje.
Si quieres quedarte en exteriores, el valle Willamette también es conocido por su observación de aves en invierno. Hay refugios de vida silvestre con varios senderos para caminar donde puedes encontrar bandadas de gansos, patos y cisnes; incluso puedes ver una que otra águila calva.
El Refugio Nacional de Vida Silvestre William Finley, establecido en 1964, cuenta con 12 millas de senderos para explorar humedales, marismas y una sabana de robles. Muy cerca encontrarás una fácil caminata hasta la cascada Alsea Falls. El sitio de recreación de Alsea Falls es un destino popular durante todo el año, y por una buena razón: a los excursionistas y ciclistas de montaña les encanta atravesar la red de senderos a través del bosque.
Si quieres hacer algo distinto en esta temporada de invierno, el valle Willamette tiene todo esto y más por ofrecerte. ¡Disfrútalo!
Alejandro Cortés